El luchador cubano Yowlis Bonne siempre destacó por su depurada técnica. Impresionantes han sido varias de sus victorias, entre las cuales guardo especialmente en mi pupila la alcanzada en el torneo Granma-Cerro Pelado organizado en Sancti Spíritus en 2005 frente al estadounidense Stephen Abbas, quien venía de ser campeón olímpico en la división inferior en Atenas-2004.
Por entonces Yowlis llevaba poco tiempo en los pesos ligeros y debía enfrentar la competencia nada menos que de Yandro Quintana, así que su acceso al equipo grande estaba casi vedado.
Para el agresivo gladiador guantanamero también funcionaba como un lastre cierto bloqueo mental que le afectaba de vez en cuando, y algunos excesos de confianza. Por eso retirado Yandro tampoco se adueñó de la categoría, y en su lugar el hombre grande era Alejandro Valdés.
Sin embargo, como explica el propio Yowlis, todo cambió en la pasada temporada cuando de una vez por todas se puso para las cosas, ya con 28 años.
“Ya no soy un muchacho y uno madura. He entendido que puedes ser el mejor del mundo y perder con cualquiera si no estás bien preparado física y mentalmente. Tomé consciencia de que en mi caso el principal rival era yo mismo”, dice.
El luchador del Guaso acaba de firmar otra excelente demostración en el recién concluido Granma-Cerro Pelado, y eso le da confianza.
“Para mí fue un torneo muy bueno. Logré realizar las acciones técnicas y tácticas previstas, y a partir de ahora espero luchar siempre así. Ganarle a Valdés también despeja dudas para seguir demostrando que pueden confiar en mí. Pienso que esto sea un aval más.”
Tuviste una oportunidad de oro el pasado año en los Panamericanos y el exceso de confianza te jugó una mala pasada…
“Fue una lección que no olvidaré nunca. Para mí el bronce y nada era prácticamente lo mismo, pero ahora tengo bien claro que todos los rivales son difíciles y no se les gana fuera del colchón.”
¿Y Londres?
“Es lo que todo el mundo quiere. Como han dicho los técnicos, a los Juegos Olímpicos irá el mejor, y espero ser yo, sin subestimar a nadie."
“Es lo que todo el mundo quiere. Como han dicho los técnicos, a los Juegos Olímpicos irá el mejor, y espero ser yo, sin subestimar a nadie."
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