El preolímpico femenino de baloncesto recién concluido en la ciudad colombiana de Neiva dejó a Cuba con bastante sobresalto, pues si bien daba lo mismo terminar en segundo que en cuarto lugar tomando en cuenta la carrera a Londres-2012, no es igual perder con Brasil que con Canadá.
Nuestras chicas sufrieron en demasía la derrota encajada en la fase preliminar contra Argentina, que las condenó a cruzarse con las brasileñas antes de tiempo, pero en ese desafío semifinal perdieron 53-66, en un resultado bastante bueno tomando en cuenta la superioridad de las auriverdes.
Lo mismo había sucedido en la versión premundial de Cuiabá-2009, por lo cual ya es preocupante el dominio de las albicelestes, o al menos su estrategia para vencer a las nuestras.
Descontando el traspiés contra las argentinas, la derrota con Brasil estaba en los planes, pero a Canadá se le podía ganar, porque se les había ganado anteriormente en un torneo triangular en España, y en definitiva perdieron 46-59 en la discusión de las medallas de bronce, en pleito donde solamente Clenia Noblet pudo cerrar con dobles dígitos.
El podio Brasil, Argentina, Canadá vuelve a repetirse con respecto al certamen continental de hace dos años, cuando perdimos la posibilidad de competir en el Campeonato Mundial de República Checa-2010, lo cual hace pensar que las discípulas de Alberto Zabala ya no son las segundas del área panamericana.
Por lo apreciado en el coliseo Álvaro Sánchez Silva, ni siquiera los partidos celebrados con anterioridad (el mejor fogueo en varios años para las cubanas) fueron suficientes para mostrar una mejoría notable.
¿Qué nos ha pasado? Pregunta difícil de responder, más aún a la distancia, pero por la nómina caribeña no puedo hablar de inexperiencia, pues estas chicas llevan tiempo jugando juntas, y a falta de más elementos me da por pensar que no pudieron compensar su falta de potencia y altura bajo las tablas.
Tomando en cuenta los cuatro grandes del certamen, Cuba tuvo los desempeños más pobres en efectividad ofensiva (solamente 34.7 por ciento en tiros de campo) y rebotes (232), en esto último quedaron por debajo sobre todo en los defensivos, lo cual daba a sus oponentes más oportunidades de tirar en una misma posesión.
Nos queda el consuelo de que lograron clasificarse para el último preolímpico mundial, donde 12 equipos batallarán el próximo año por las últimas cinco plazas a la cita estival londinense, pero aquello será una misión más difícil.
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