Como un verdadero cubo de agua
fría cayó sobre los seguidores y practicantes de la lucha en todo el mundo el
anuncio hecho esta semana por el Comité Olímpico Internacional (COI) sobre la
posibilidad de eliminarla como deporte en futuras ediciones estivales.
Según un panel del COI, esta disciplina fue la que menos puntuación sacó
en un análisis integral de todos los deportes con asiento en Londres-2012, y
por tanto no formará parte de las 25 que conformarán en lo adelante la columna
vertebral de los Juegos.
Aunque todavía no es definitivo, porque deberá ratificarse en mayo, y
luego someterse a votación en septiembre, el anuncio tomó por sorpresa a la
familia de la lucha, que ahora deberá apresurarse en redactar un informe lo más
completo posible para defender la permanencia de este deporte.
Sorprendió a muchos porque salvo señalamientos puntuales, sobre todo al
estilo grecorromano, jamás fue señalada o puesta en duda la permanencia de la
lucha, como ha sucedido por ejemplo con el boxeo, y ahora de golpe y porrazo
recibe este mazazo directo en la sien.
De momento este parece ser el panorama, aunque quizás luego de Río de
Janeiro-2016 se unan a esta bolsa el golf y el rugby, para entonces poner a casi
10 deportes compitiendo por tres plazas, y entonces mucho dependerá de la sede
para definir a las favorecidas.
Pudiera pensarse también que en este caso el COI pone a competir la
lucha con estos otros deportes menos universales para ahorrarse el dolor de
cabeza de tener que decidir por uno de ellos, pues difícilmente puedan derrotar
en una votación a una disciplina con tanta tradición.
UNA OPINIÓN
Para el presidente de la Federación cubana de
lucha, Eduardo Pérez Téllez, esto llegó completamente sin previo aviso, pero quedará
solamente en una mala noticia.
La familia de la lucha está sorprendida y disgustada, pero la solidez de
este deporte es tanta que no tengo ninguna duda de que las cosas no pasarán de
ahí, señaló.
El directivo añadió que ya la Federación Internacional
(FILA) se vio forzada a modificar la agenda prevista para su Congreso ordinario
en Tailandia, dentro de unos días, y su primer paso será preparar una
argumentación convincente sobre “el error que sería” aplicar lo anunciado.
Seria despojar a la lucha del
espacio que con toda justicia se ha ganado desde Atenas-1896, e incluso antes
en la Grecia Antigua ,
cuando estuvo entre las pocas disciplinas de los Juegos Olímpicos de esa época
junto al atletismo o la natación, aseveró.
Por último, recordó que la
FILA lleva varios cuatrienios modificando sus reglamentos
para aumentar la categoría de espectáculo de este deporte, y por eso reiteró
que ve mucha solidez en los elementos a exponer para evitar esta medida.
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