La reconquista del cetro general en los XXII Juegos Centroamericanos
y del Caribe de Veracruz-2014 distinguió la fortaleza del deporte
cubano, que tuvo un año bastante fructífero.
El retorno de la mayor de las Antillas al escenario de las justas
regionales más antiguas del mundo tras su ausencia a Mayagüez-2010 por
falta de seguridad a su embajada deportiva, con una delegación renovada
en un 75 por ciento, en una liza organizada y concebida para que los
anfitriones se impusieran en el medallero general, y con múltiples
presiones, eleva los quilates de una actuación otrora sencilla.
Fueron 11 las jornadas a la sombra de México en la tabla de posiciones, hasta que en la última semana la mayor isla del Caribe ocupó la cima con un remate impresionante en atletismo, boxeo, remo, voleibol de playa y lucha, sumadas a las previas obtenidas en tiro, canotaje, judo y ciclismo, además de algunas individualidades, para redondear los 123 metales áureos conquistados en la llamada Puerta de América, junto a 66 de plata y 65 de bronce, delante de México (115-106-111).
Los cinco oros ganados por la ciclista Marlíes Mejías o el desempeño perfecto de los remeros con 10 títulos en igual número de pruebas, fueron quizás los puntos más descollantes del notable desempeño colectivo.
Pero además de la justa regional celebrada del 14 al 30 de noviembre, el 2014 estuvo marcado por un intenso calendario competitivo, donde destacó la conclusión de la IV Serie Mundial de Boxeo, que vio coronarse en su estreno a los Domadores de Cuba.
Los púgiles de la nación caribeña dominaron ampliamente el grupo eliminatorio B, superaron a Estados Unidos en cuartos de finales, a Rusia en semifinales y al potente seleccionado de Azerbaiyán en la discusión del título, para cerrar con balance total de 63 victorias y solamente 18 derrotas, la mayoría de estas últimas en los hombros de los más inexpertos de la escuadra. En el orden individual, Erislandy Savón resultó seleccionado el mejor competidor del certamen, luego de acabar invicto y totalizar 1 172 puntos.
Dos títulos mundiales llegaron en el año, conquistados por el luchador Mijaín López y la judoca Idalys Ortiz, sin dudas los principales rostros del deporte cubano en la actualidad, y ambos para repetir en la condición de reyes del planeta, el gladiador por quinta vez en su carrera, y la Ortiz para ratificar su reinado del año anterior.
Otro oro planetario, pero esta vez bajo techo, sumó la pertiguista Yarisley Silva, mientras que fueron subtitulares universales el luchador Reineiri Salas y el judoca José Armenteros, mientras que el remero Ángel Fournier se ratificó en la elite de su disciplina con preseas en varias competiciones internacionales.
El deporte nacional también vivió momentos trascendentales durante 2014, como el retorno de Cuba a la Serie del Caribe tras más de medio siglo de ausencia, y la contratación de varios peloteros de la Isla para intervenir en las Grandes Ligas japonesas.
Otras disciplinas colectivas mostraron cierta recuperación, como el fútbol, con su inesperado bronce en Veracruz y buenas presentaciones en lides caribeñas, y el baloncesto femenino, que se coronó en el Premundial de las Américas y regresó a una justa del orbe con una actuación digna.
El 2015 nos aguarda con nuevas emociones y punto culminante en los Juegos Panamericanos de Toronto, pero no se podrá perder de vista que a lo largo de casi todo el año se seguirán otorgando boletos para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro-2016, el punto culminante de este cuatrienio.
Fueron 11 las jornadas a la sombra de México en la tabla de posiciones, hasta que en la última semana la mayor isla del Caribe ocupó la cima con un remate impresionante en atletismo, boxeo, remo, voleibol de playa y lucha, sumadas a las previas obtenidas en tiro, canotaje, judo y ciclismo, además de algunas individualidades, para redondear los 123 metales áureos conquistados en la llamada Puerta de América, junto a 66 de plata y 65 de bronce, delante de México (115-106-111).
Los cinco oros ganados por la ciclista Marlíes Mejías o el desempeño perfecto de los remeros con 10 títulos en igual número de pruebas, fueron quizás los puntos más descollantes del notable desempeño colectivo.
Pero además de la justa regional celebrada del 14 al 30 de noviembre, el 2014 estuvo marcado por un intenso calendario competitivo, donde destacó la conclusión de la IV Serie Mundial de Boxeo, que vio coronarse en su estreno a los Domadores de Cuba.
Los púgiles de la nación caribeña dominaron ampliamente el grupo eliminatorio B, superaron a Estados Unidos en cuartos de finales, a Rusia en semifinales y al potente seleccionado de Azerbaiyán en la discusión del título, para cerrar con balance total de 63 victorias y solamente 18 derrotas, la mayoría de estas últimas en los hombros de los más inexpertos de la escuadra. En el orden individual, Erislandy Savón resultó seleccionado el mejor competidor del certamen, luego de acabar invicto y totalizar 1 172 puntos.
Dos títulos mundiales llegaron en el año, conquistados por el luchador Mijaín López y la judoca Idalys Ortiz, sin dudas los principales rostros del deporte cubano en la actualidad, y ambos para repetir en la condición de reyes del planeta, el gladiador por quinta vez en su carrera, y la Ortiz para ratificar su reinado del año anterior.
Otro oro planetario, pero esta vez bajo techo, sumó la pertiguista Yarisley Silva, mientras que fueron subtitulares universales el luchador Reineiri Salas y el judoca José Armenteros, mientras que el remero Ángel Fournier se ratificó en la elite de su disciplina con preseas en varias competiciones internacionales.
El deporte nacional también vivió momentos trascendentales durante 2014, como el retorno de Cuba a la Serie del Caribe tras más de medio siglo de ausencia, y la contratación de varios peloteros de la Isla para intervenir en las Grandes Ligas japonesas.
Otras disciplinas colectivas mostraron cierta recuperación, como el fútbol, con su inesperado bronce en Veracruz y buenas presentaciones en lides caribeñas, y el baloncesto femenino, que se coronó en el Premundial de las Américas y regresó a una justa del orbe con una actuación digna.
El 2015 nos aguarda con nuevas emociones y punto culminante en los Juegos Panamericanos de Toronto, pero no se podrá perder de vista que a lo largo de casi todo el año se seguirán otorgando boletos para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro-2016, el punto culminante de este cuatrienio.
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