Pasaron 16 años y Colombia vuelve a un Mundial de fútbol, y lo hacía
con grandísimas expectativas, luego de una excelente fase
clasificatoria en Suramérica, pero sufrió la lesión de su máxima
estrella, el delantero Radamel Falcao.
Gracias a su brillante proceso en las eliminatorias suramericanas
se ganaron el derecho de ser cabezas de grupo, y eso les dejó en una
llave accesible para mantenerse en competencia, por delante de Costa de
Marfil, Japón y Grecia.
Falcao mantuvo en vilo a todo el país hasta este lunes, cuando en definitiva se anunció su exclusión del listado definitivo por no encontrarse al ciento por ciento de sus posibilidades y, como él mismo dijo, no afectar a un compañero que estaba en mejor estado físico.
Sin embargo, personalmente me hubiera gustado llevarlo porque cuando de verdad lo extrañarán es al cierre de la preliminar, el 28 o 29 de junio, en dependencia de si pasan como primeros o como segundos del grupo C, en los octavos de final. En ese momento, con casi otro mes más de recuperación, Falcao pudiera ser la carta de triunfo del combinado cafetero ante uno de los grandes del mundo, que pudiera ser Italia, Uruguay o Inglaterra.
De todas maneras, este primer acercamiento finaliza en la fase de grupos, y no creo que los colombianos queden fuera en esta instancia. Definir su acompañante es mucho más complicado, porque los otros tres conjuntos tienen bastante paridad, cada uno con sus características.
La mejor defensa, casi siempre garantía de mantenerse en competencia, es la de Grecia, con una última línea casi impenetrable, pero le falta gol. Mucho dependerá de sus posibilidades el estado físico de sus zagueros, un poco lentos pero letales en el juego aéreo.
En tanto, Japón tiene gran velocidad y talento en su mediocampo, pero en jugadas a balón parado, especialidad de los europeos, podrían sufrir. Tanto a ellos como a los griegos pudiera jugarles también una mala pasada el clima húmedo y el calor de Brasil, además de los desplazamientos, en particular a los nipones, que para su último choque ante Colombia deberán atravesar el país de Este a Oeste.
Por último, los marfileños tienen la última oportunidad de su generación dorada a base de los Drogba, Touré y Kalou, que se han quedado en la fase inicial en los dos Mundiales anteriores por compartir llave con planteles superiores.
Por esto último les doy el otro boleto a los africanos, que deben dar un golpe de autoridad el 15 de junio cuando se midan a los japoneses, para enfrentar con más calma sus siguientes duelos.
Falcao mantuvo en vilo a todo el país hasta este lunes, cuando en definitiva se anunció su exclusión del listado definitivo por no encontrarse al ciento por ciento de sus posibilidades y, como él mismo dijo, no afectar a un compañero que estaba en mejor estado físico.
Sin embargo, personalmente me hubiera gustado llevarlo porque cuando de verdad lo extrañarán es al cierre de la preliminar, el 28 o 29 de junio, en dependencia de si pasan como primeros o como segundos del grupo C, en los octavos de final. En ese momento, con casi otro mes más de recuperación, Falcao pudiera ser la carta de triunfo del combinado cafetero ante uno de los grandes del mundo, que pudiera ser Italia, Uruguay o Inglaterra.
De todas maneras, este primer acercamiento finaliza en la fase de grupos, y no creo que los colombianos queden fuera en esta instancia. Definir su acompañante es mucho más complicado, porque los otros tres conjuntos tienen bastante paridad, cada uno con sus características.
La mejor defensa, casi siempre garantía de mantenerse en competencia, es la de Grecia, con una última línea casi impenetrable, pero le falta gol. Mucho dependerá de sus posibilidades el estado físico de sus zagueros, un poco lentos pero letales en el juego aéreo.
En tanto, Japón tiene gran velocidad y talento en su mediocampo, pero en jugadas a balón parado, especialidad de los europeos, podrían sufrir. Tanto a ellos como a los griegos pudiera jugarles también una mala pasada el clima húmedo y el calor de Brasil, además de los desplazamientos, en particular a los nipones, que para su último choque ante Colombia deberán atravesar el país de Este a Oeste.
Por último, los marfileños tienen la última oportunidad de su generación dorada a base de los Drogba, Touré y Kalou, que se han quedado en la fase inicial en los dos Mundiales anteriores por compartir llave con planteles superiores.
Por esto último les doy el otro boleto a los africanos, que deben dar un golpe de autoridad el 15 de junio cuando se midan a los japoneses, para enfrentar con más calma sus siguientes duelos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario