La venidera Serie Nacional verá en acción a un pitcheo bien joven, quizás uno de los más inexpertos en la historia de nuestros clásicos, precisamente cuando esta área es la más afectada en los últimos tiempos, con buena parte de la responsabilidad en los pobres resultados internacionales de Cuba.
Se extrañará la sapiencia de hombres como Vera. |
Por supuesto que no me refiero a la actuación de nuestros lanzadores en esos eventos, sino al resto de los concursantes en la temporada, que ponen el listón bien bajo a los bateadores durante todo el año y luego esa “comodidad” les afecta cuando enfrentan a serpentineros con mayor oficio e inteligencia.
Pues bien, la inminente Serie 51 cuenta con 234 pitchers según las nóminas oficiales de 32 integrantes, y de ellos solamente 63 acumulan de por vida 20 victorias o más, una cantidad alcanzada por un solo pitcher durante una sola campaña en más de una ocasión en clásicos cubanos.
Sacando también a los 41 novatos, evidentemente sin resultados en este tipo de certámenes, nos queda la preocupante cifra de apenas el 32.6 por ciento de los dueños de la lomita en la venidera campaña con algo de experiencia. ¡Menos de un tercio!
Otro dato bien llamativo es que solamente 23 lanzadores poseen una experiencia de más de 10 temporadas al máximo nivel, un total seguramente inédito en los últimos 30 años, con la excepción quizás de la Serie de 1996-1997, la posterior a la forzosa retirada de muchísimos veteranos ilustres de nuestros pasatiempo nacional, léase Víctor Mesa, Romelio Martínez, Lázaro Junco y otros. Nótese que sigo diciendo quizás; en esos años no existían las Guías y tendría que zambullirme en muchos papeles para tener la certeza total.
Como era de presagiar, el cuerpo de pitcheo más inexperto es el del debutante Mayabeque, donde el más “curtido” es Ariel Miranda, quien ha ganado cinco partidos en cuatro Series.
Artemisa, Cienfuegos, Villa Clara y Ciego de Ávila presentan cada uno a seis tiradores con un recorrido notorio en el béisbol cubano, y no por gusto los tres últimos aparecen entre los favoritos al trono según las opiniones de la mayoría de los especialistas.
Así las cosas, estimados lectores, es bien difícil que levantando el montículo y cambiando el modelo de la Mizuno se note una verdadera mejoría en el pitcheo cubano durante la Serie 51.
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