domingo, 18 de diciembre de 2011

Lázaro Álvarez, un novato espectacular

Por Lemay Padrón Oliveros

Como sucede en la categoría de mayores en ambos sexos, para elegir al Novato del año en Cuba esta vez tampoco habrá mucha discordia, pues el boxeador pinareño Lázaro Álvarez manda, y con holgura, sobre el resto de sus potenciales rivales.
El chico de apenas 20 años de edad encajó apenas una derrota en este 2011, en los IV Juegos del ALBA en Venezuela, pero estuvo perfecto en las principales competiciones de la temporada, léase Campeonato Mundial de Mayores en Bakú y Juegos Panamericanos de Guadalajara.
En ambos certámenes fue exigido por contrarios de mayor experiencia, pero Álvarez supo hacer valer sus mejores armas para cerrar como el mejor 56 kilogramos del planeta.
A estos eventos se añaden los cetros en la Clasificatoria Panamericana en Cumaná y el Batalla de Carabobo, ambos en Venezuela, además del Córdova Cardín de La Habana y el Nacional por equipos, por lo cual nadie le puede hacer sombra.
Otra con méritos es la ciclista Arlenis Sierra, pero muestra solamente como aval el título de la ruta individual en Guadalajara.
Como me sucede casi todos los años, tengo mis reservas con los nominados enviados por el Instituto cubano de deportes (Inder) en este apartado.
Están propuestos también el nadador Hanser García y el velocista Roberto Skyers, pero ninguno de los dos son novatos, pues han tomado parte en otros certámenes internacionales.
En cambio, sí pusiera en esta lista al luchador Liván López, pese a tener ya 29 años, porque fue en esta temporada en la cual pudo integrar el equipo de mayores por primera vez en su vida, ya que siempre vivió a la sombra del multimedallista mundial Geandry Garzón.
López ganó el bronce en la división de 66 kilos en el Mundial de Estambul y conquistó el único oro del estilo libre masculino en suelo tapatío, además de dominar los Juegos del ALBA, el Panamericano de la disciplina y el Campeonato Nacional.
De todas maneras, no creo que reúna méritos para destronar a su coterráneo, y todo queda en una diferencia de criterios en cuanto a elegibilidad.

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