Solamente un milagro podía evitarla, y aunque el Real Madrid estuvo cerca de lograrlo, en definitiva será alemana la final de
El
conjunto merengue puso a temblar a Dortmund con su 2-0 en los minutos finales,
pero si hubieran estado más acertados en los 15 primeros, en los cuales
fallaron tres ocasiones claras, en vez de un temblor hubiera sido un derrumbe.
Por
supuesto, el Borussia también tuvo sus chances, pero esta vez no estuvo
impecable a la ofensiva como la semana anterior.
Demasiado
fue el peso de la goleada encajada como visitante, y por mucho corazón que se
pusiera, era muy difícil lograrlo. De todas maneras, para consuelo de sus
aficionados, queda lo cerca que estuvieron de la épica remontada.
Peor lo
hizo el Barcelona, que no pudo quebrar la valla del Bayern ni siquiera una vez
en dos partidos y fue goleado tanto en suelo bávaro como en España, en ambos
casos viéndose muy lejos del nivel que lo llevó a ser el mejor equipo del
mundo.
Se sabía
que sin Messi el Barca no funcionaría igual, pero la lección ha sido demasiado
dura. Es increíble que un plantel capaz de generar tanto fútbol tenga tan pocos
remates al arco, y la mayoría de un defensa. La última línea ha sido su punto
flaco en todos estos años, pero ahora se ha sumado un mediocampo escaso de
ideas y unos delanteros demasiado erráticos.
Si no
está Messi Dani Alves no sabe a quién enviarle la pelota, y del mismo mal
parecen haberse contagiado Xavi e Iniesta. Para colmo, encajan un autogol del
único defensor que parece con edad y calidad suficiente como para mantenerse en
la alineación titular por varios años, como para más humillación.
Del
Bayern, poco que decir, hablaron en el césped. Parecen hoy por hoy el mejor
equipo del mundo, sólido en todos los sectores del campo, y quizás listo para
sepultar la maldición que les ha acompañado en las finales.
Si no ganan esta, que tienen ante un conjunto al cual han dominado en los topes bilaterales con comodidad, me parece que Josep Guardiola tendrá un gran trabajo sicológico por delante en la venidera campaña. Para mí, son inmensamente favoritos.
Si no ganan esta, que tienen ante un conjunto al cual han dominado en los topes bilaterales con comodidad, me parece que Josep Guardiola tendrá un gran trabajo sicológico por delante en la venidera campaña. Para mí, son inmensamente favoritos.
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